lunes, 1 de septiembre de 2014

Himno al Viento Inmortal. MONO.

Cuando yo era joven, pero jovenzuelo menor, no de 27 como ahora, era fome, pero era fomecillo. Al tratar de contar una talla, cuando me tocaba el turno, el viento hacía pasar la característica mata de paja enredada en el desierto a tiempo, o a un tiempo calificable de divertido en tanto quedaba cortamente demarcado que la talla, la broma, había sido aburrida, había sido fome y eso fue todo el divertido resumen del asunto. El día de hoy tengo 27, y un día tal vez tenga 70, y seré tan fome, que una banda en Japón llamada Mono me dedicará la tocata en vivo de su álbum en honor al Viento Inmortal que todavía transporta la mata de paja enredada por el desierto, Gigantesca la transportará desde El Fondo del Tiempo, para contar a los Pueblos lo aburrida que fue una broma contada, tal vez, poco después de cumplir Dos Décadas perspirando fomedad sobre la Faz de la Tierra. El Viento Inmortal, un Himno a ese Viento Inmortal. Por MONO.

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